SOCIAL MEDIA

jueves, 7 de marzo de 2019

¿Por qué las mamás nos metemos tanto con otras madres?


Toooodas hemos experimentado la metida de otra mamá sobre lo que hacemos o no hacemos con nuestros hijos... Y si tú no lo has experimentado... sorpresa, es que la metida quizás seas tú.

Ya sabes a lo que me refiero, a aquellas mamás que siempre tienen un consejo, que siempre encuentran qué criticar. Es una práctica de siempre, pero ahora más frecuente gracias al Internet. Ahí es cuando sacamos las uñas de verdad.


“Qué mala madre por dar de pecho todavía al hijo tan grande, parece incesto”.

“Qué madre tan haragana por sólo darle fórmula a su bebé en vez de amamantar”.

“Qué estupida ésta por cargar al niño así”.

“Yo soy mamá de cuatro y te puedo decir que así no....”.

Etc, Etc, Etc. Ejemplos hay muchos, y es que en todo nos podemos meter.

¿Por qué? ¿Por qué las mamás nos metemos tanto con otras mamás? 

La doctora psicoterapeuta Melissa Divaris Thompson dice que algunas mamás se vuelven metidas como una manera de validar sus propias habilidades como madres, "para sentirse un poco mejor sobre ellas mismas, aunque sea inconscientemente", dice la doctora. Es decir, lo hacemos para tapar nuestras propias inseguridades. Es más fácil juzgar y criticar que aceptar que otra madre tenga una forma distinta de hacer algo y que pueda hasta ser mejor que la nuestra.

Esto conduce a situaciones donde todas perdemos: las madres que están a la defensiva atacan a otras mamás y éstas en consecuencia se vuelven inseguras de sus propias decisiones.

Y las redes sociales empeoran las cosas. Nos dan una valentía -tras el anonimato- para decir cosas que no nos atreveríamos a decir en persona. Si es en contra de una mamá famosa pues peor, porque ahí nuestras inseguridades (y nuestra envidia) explotan más.

Tenemos que recordar que vivimos en una sociedad que no es generosa ni bondadosa con las mujeres. ¿Por qué entonces atacarnos unas a las otras? Cada vez que nos metemos, que criticamos, que ofrecemos un comentario negativo, estamos haciendo una elección y estamos eligiendo ser esa clase de persona que se mete, que critica, que es negativa. ¿Por qué no escogerlo contrario?

Es muy probable que este fenómeno de las madres metidas no se acabe nunca, por eso, en un próximo artículo analizaremos cómo lidiar con esas madres que se meten.